Asia connection

Steven Seagal, ese gran, enorme hombre. Pero si seguro que tiene pasta de sobra, ¿No le apetecería un agradable retiro en Benidorm o Torremolinos con todos los muchachos de su edad? ¿De verdad es necesario que nos torture con un nuevo bodrio cada dos por tres? 

Asia connection de Daniel Zirilli (mala señal, suena a zurullo) va de que un par de ladrones de bancos de Camboya (aunque son yankis) se hacen inesperadamente con un gran botín en uno de sus asaltos. Resulta que es el dinero de un mafioso (Steven Seagal) y este se propone recuperarlo. 

Si me seguís habitualmente sabréis que suelo clasificar las pelis de Steven Seagal entre malas, muy malas y pésimas. Pues buena noticia, esta es de las malas. De hecho no empieza mal del todo, pero enseguida se empieza a torcer con una incongruencia de guión tras otra y la terminan cagando una vez más. 

De nuevo el señor Seagal se aprovecha de sus fans y les escatima su presencia en la mayor parte de la película. Y sólo aparece puntualmente, más para soltar alguna gilipollez que para dar mamporros. La ciática y la artritis es lo que tiene. Él, mientras tanto, a seguir haciendo caja. 

Por cierto, un mensaje para los más machotes: si decides teñirte el pelo y la perilla, no lo hagas con productos del chino de la esquina que se nota mucho. Y un consejo más: evita los pañuelos pirata en la cabeza, aunque te parezca difícil de creer seguirás pareciendo calvo. 

Calificación final: Mala. Ni siquiera vale para echarse unas risas.